Ciudad de México, CDMX.- El Senado de la República aprobó con 75 votos a favor y 37 en contra la nueva Ley Nacional para Eliminar Trámites Burocráticos, promovida por la presidenta Claudia Sheinbaum. La norma busca simplificar y digitalizar los trámites en los tres niveles de gobierno, aunque ha generado preocupación entre legisladores de oposición por posibles afectaciones a la privacidad y al federalismo.
La legislación contempla la creación del Portal Ciudadano Único de Trámites y Servicios, una plataforma digital que centralizará gestiones administrativas y permitirá autenticaciones mediante la nueva herramienta Llave MX, vinculada directamente con la CURP del ciudadano. Además, se implementarán modelos nacionales de homologación, digitalización y atención ciudadana.
La presidenta de la Comisión de Gobernación, Lilia Margarita Valdez, afirmó que el objetivo es construir una administración pública “más transparente, segura y accesible”. A su vez, la senadora Araceli Saucedo, de Estudios Legislativos, defendió que la ley atiende demandas ciudadanas para reducir la burocracia y facilitar el acceso a servicios públicos.
Críticas: centralización, exclusión digital y vigilancia
La aprobación no estuvo exenta de controversia. Senadores del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano votaron en contra y presentaron reservas que fueron desechadas.
Desde MC, Alejandra Barrales alertó que la ley concentra en la Agencia de Transformación Digital 22 nuevas atribuciones, convirtiéndola en “una recolectora masiva de datos personales sin contrapesos claros”.
Laura Esquivel, del PAN, denunció que la desaparición del Consejo y el Observatorio de Mejora Regulatoria elimina mecanismos de rendición de cuentas, y acusó al gobierno federal de querer convertir a la nueva agencia en un “Big Brother” de los ciudadanos.
Néstor Camarillo, del PRI, criticó la imposición de un modelo centralizado que ignora avances estatales y no considera la exclusión digital de millones de mexicanos sin acceso a internet.
Posturas a favor
Por el contrario, senadores de Morena, el PT y el PVEM defendieron el proyecto como un paso hacia la modernización del Estado.
Geovanna Bañuelos, del PT, lo calificó como una transformación profunda en la relación entre ciudadanía y gobierno. Karen Castrejón, del PVEM, destacó que los ciudadanos podrán ahorrar tiempo y dinero gracias a la digitalización.
Desde Morena, Olga Patricia Sosa respaldó la visión tecnológica de la presidenta Sheinbaum, señalando que esta ley permitirá combatir la corrupción y agilizar procesos con mayor equidad.
¿Qué sigue?
Tras su aprobación, el dictamen fue enviado al Ejecutivo Federal para su publicación. De promulgarse, la ley activará herramientas como el Expediente Digital Ciudadano y el Repositorio Nacional de Tecnología Pública, y marcará un cambio estructural en la forma en que los mexicanos interactúan con el gobierno.
