“Si tú me quieres…” Así la nueva canción presentada por Mariana Cuéllar, presidenta honorífica del DIF Tlaxcala e hija de la gobernadora Lorena Cuéllar.
Un jingle tan ofensivo, lleno de frases como:
“No te rindas, por favor”
“Hoy quiero agradecer por ser feliz”
“Piensa en lo bueno y en la alegría, para que todo lo logres con amor”
“Si tú me quieres, yo te quiero…”
Mi viditaaaa… Pero mientras tanto, en la Tlaxcala real, en la que vivimos nosotros:
- Desabasto de medicamentos en los hospitales más importantes del estado.
- Personal médico manifestándose por la falta de insumos y condiciones dignas de trabajo.
- Ciudadanos comprando su propio material para poder recibir atención médica.
- Falta de recursos básicos para atender a la población que más lo necesita.
¿Nos piden que no nos rindamos? ¡Jajajaja!
¿Acaso no ven que en Tlaxcala las oportunidades laborales son nulas?
¿Qué los hospitales están sin medicinas?
¿Qué la inseguridad sigue en crecimiento?
¿Y qué la economía está peor que nunca?
¿Qué hay 0 atención a nuestra salud mental?
Mariana, tu trabajo es dar RESULTADOS, no amor.
A ver, NO estamos en tiempos electorales, pero eso sí: nos tienen saturados con propaganda disfrazada de “campañas institucionales”.
Nos tienen envueltos en su ausencia de trabajo, pero bien bombardeados con sus precampañas ilegales.
Porque eso es lo que es: propaganda emocional pagada con presupuesto público.
Mariana Cuéllar ocupa el puesto 31 de 32 en el ranking nacional de presidentas honoríficas del DIF. Es decir, está en el penúltimo lugar, una de las peores evaluadas del país. Su gestión ha sido fuertemente criticada, sobre todo por la falta de resultados concretos en áreas clave como la atención a grupos vulnerables, y la falta de transparencia en el manejo de los recursos.
A pesar de eso, Mariana recibe más de 500 millones de pesos al año para el DIF Tlaxcala.
¿Y el sector salud?
El responsable de salud, Rigoberto Zamudio Meneses ,ha sido también duramente señalado por los problemas de desabasto y la crisis en los servicios médicos. Los hospitales están desbordados, el personal en huelga por falta de insumos, y la población sin acceso a medicamentos. (Vean mis historias)
Pero este gobierno prefiere seguir cantando, en lugar de dar respuestas concretas.
Tlaxcala no necesita jingles ni canciones sentimentales.
Necesitamos RESULTADOS, gestión eficiente y soluciones reales a los problemas urgentes.
Necesitamos salud digna, que se nos garantice la seguridad, una mejor educación, planes que impulsen la economía de nuestro estado y, por supuesto, servicios públicos de calidad.
Yo creo que piensan que a lo mejor con amor, se nos cura el desabasto, o con una rola se nos olvida que los hospitales no tienen ni pa’ gasas.
Qué suerte tener un gobierno tan “amoroso”… Lástima que el amor no sana, no alimenta, y mucho menos gobierna.
