OPINIÓN | Lectura Poselectoral: entre el abstencionismo y la legitimidad – Tribuna Pública

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¿Acudió a votar el pasado 5 de junio? Se lo pregunto porque, sin temor a equivocarme; el abstencionismo, hartazgo, apatía, desdén fueron quienes ganaron la elección para elegir al titular del Ejecutivo Local.

De acuerdo con los resultados preliminares, más del 62% de quienes integran el padrón electoral en Oaxaca, no acudió a votar; por lo tanto, el abanderado de la Coalición “Juntos Haremos Historia en Oaxaca”, integrada por Morena, Partido del Trabajo, Partido Verde, Partido Unidad Popular, Salomón Jara, virtual ganador de los comicios; gobernará con el 25% de la aprobación del pueblo oaxaqueño.

Una de las causas, posibles, por las que la sociedad no acudió a las urnas, fue que el pueblo oaxaqueño mostró su indiferencia ante campañas electorales estériles, insípidas, carente de propuestas fehacientes; eso sí, llena de descalificaciones y acusaciones, pero que sólo se quedarán ahí, sin denuncias.

Las y los candidatos que compitieron para la gubernatura de Oaxaca quedaron a deber en los debates; unos por no acudir, pero cuando acudieron tampoco tuvieron propuestas contundentes, sólo verborrea demagógica y populista; los demás a repetir los comentarios clásicos de cada contienda electoral; es decir, salirse por la tangente.

Otro indicador que nos deja esta elección son los 30 mil 515 votos nulos. El anular el voto, también es una forma de expresar que nadie, de quienes compiten, te representa. Desafortunadamente, la democracia oaxaqueña y mexicana se ha convertido en votar por el “menos peor”.

Otro punto a tratar será ¿qué tan legítimo es gobernar con sólo el 25% de la preferencia electoral? La legitimidad es el grado de aceptación o consenso que posee una persona o institución en asuntos públicos.

La falta de legitimidad ha ocasionado que otras administraciones emprendan reformas, decisiones rápidas, y que, en la mayoría de las veces, se vuelven criticadas durante el gobierno que encabezan o quedan marcadas en las gavetas de la Historia, tal como sucedió con los gobiernos de Carlos Salinas de Gortari, Enrique Peña Nieto, Gabino Cué. “Quien no conoce su historia está condenado a repetirla”, ¿Sucederá lo mismo con esta administración?

Otra lectura que deja estas elecciones, no sólo en Oaxaca, sino en todo México es: ¿El PRI se encuentra muerto? O ¿Está herido de muerte? Las alianzas pactadas con el PAN y el PRD no sirvieron de mucho. Es de llamar la atención de quienes en algún momento eran “priistas” de “hueso colorado”; ahora resulta, son más partidarios de Morena que López Obrador, lo expreso, por el nivel de discurso que manifestaron en redes sociales, porque según ellos, “ahora sí, ya llegó el cambio”. Con este resultado, rumbo al 2024, el PRI se ve más cerca de Morena que del PAN y el PRD. Veremos que dice Alejandro Moreno.

En Oaxaca, parece que no habrá ningún conflicto poselectoral, por lo menos Alejandro Avilés manifestó que los resultados no le favorecen. Esperemos que externan los demás contendientes.

El domingo 5 de junio que observé la celebración de Jara, tuve un déjà vu, porque evoqué la victoria del gobierno de coalición Unidos por la Paz y el Progreso, integrada por el PAN, PRD, Convergencia y PT, encabezada en aquel entonces por Gabino Cué. Se esperaba mucho de ese gobierno de alternancia. Todos sabemos como empezó y como terminó.

Felices quienes ganó su candidato, porque más allá del progreso de Oaxaca, es porque obtendrán un beneficio directo o indirecto; tristes quienes vieron perder a sus candidatos y candidatas, reitero, no porque interese el progreso, sino porque ya no recibirán ese beneficio directo o indirecto. Si continúa la violencia, inseguridad, escasez de agua, bloqueo de calles… Seguirá perdiendo la población.

La ventaja de ser apartidista es que se puede criticar y señalar sin remordimientos; empero, deseamos que, sin importar el color partidista, quien gobierne tenga la habilidad para resolver, contundentemente, los problemas sociales que aquejan a Oaxaca. El cambio es de todas y todos. Abandonemos la idea del gobernante omnipotente.

Al final, usted, tiene la mejor opinión…

Eduardo Bizuet

  • Ex Defensor de las Audiencias de la CORTV. Licenciado en Derecho, maestro en Derecho Constitucional y Administrativo, maestrante en Ciencias de la Educación. Desde 2010, es docente en las áreas de Derecho, Ciencias de la Comunicación, Ciencias Políticas, Ciencias Sociales y Económico-Administrativas.

1 comentario en “OPINIÓN | Lectura Poselectoral: entre el abstencionismo y la legitimidad – Tribuna Pública”

  1. César Eduardo Julián Reyes

    Buenas noches
    Mtro. Bizuet

    Concuerdo con su opinión.
    Cómo ciudadano me encuentro anodadado de la poca participación ciudadana que hubo en esta elección a Gobernador, y como es que solo el 25% de la ciudadanía nos impuso a un nuevo gobierno, sin que se tome en cuenta el parecer del otros 75% de la población.
    Me quedo con la pregunta que, usted bien tuvo a realizar.
    ¿qué tan legítimo es gobernar con sólo el 25% de la preferencia electoral?

    Felicidades por su opinión 👍🏿

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